José Osorio, máxima autoridad policial artiguense, dijo que no se sabe si hay “hechos anteriores” porque “recién comenzó” la investigación.
En la noche del pasado domingo, dos enfermeras que ejercen su profesión en el departamento de Artigas fueron imputadas por la presunta comisión de delitos comprendidos en el artículo 280 del Código Penal, referido a la “apropiación de niñas, niños o adolescentes para la adopción”.
La Fiscalía comenzó a investigar a estas dos mujeres a raíz de una denuncia presentada por el Instituto del Niño y Adolescente del Uruguay (INAU), en la que se detallaba que una de ellas habría sido el nexo entre una embarazada a término y una mujer residente en Brasil, quien pretendía pagarle a cambio de su bebé.
El jefe de Policía de Artigas, José Osorio, brindó una conferencia de prensa acerca de este caso en la jornada de este lunes en la que confirmó que, además de una promesa de remuneración, a la mujer “en situación de vulnerabilidad” se le ofreció parir en la ciudad fronteriza de Quaraí.
“Es un delito grave, incluso la pena es grave: la mínima son dos años de penitenciaría. Es un tema delicado; siempre lo que se refiere a tráfico de menores es un tema complicado. Nosotros no tenemos determinado hasta el momento si hay más casos anteriores a este”, afirmó.
Además, señaló que aún “no está determinado” el monto que le ofrecieron a la víctima porque la investigación “recién comenzó”. “No podemos establecer si hay conexiones locales o internacionales; empezamos el viernes y estamos en proceso. Sería bueno que, si alguien tiene conocimiento de situaciones anteriores, se presente y las denuncie”, finalizó.
Hay una tercera mujer involucrada en el caso, abogada de profesión, que quedó “emplazada sin fecha”.
Fuente: Montevideo portal.
